Boletín informativo y Arcadi Oliveres

Boletín Informativo
El movimiento de Cerdanyola ha sacado un boletín informativo con el nombre de d'indign@ts como una nueva medida de divulgació de sus mensajes y el trabajo en las diferentes comisiones que se han puesto en marcha (jurídica , acción, difusión, comunicación, infraestructuras, contenidos ...). Entre otras cuestiones, el boletín plantea propuestas globales y locales para aplicar la política entre las que hay: "equiparar el sueldo de los políticos al de la media de los trabajadores, eliminar la impunidad jurídica; devolver el dinero público entregados a los bancos. ; eliminar los paraísos fiscales; aumentar las pensiones, impulsar una sanidad pública de calidad, o transparencia en las acciones políticas ", en cuanto a las propuestas de carácter general, y, en relación a las locales," eliminar cargos de confianza; controlar la concesión de licencias de obras, detener el proceso de urbanización y la especulación inmobiliaria; transparencia del gasto público, detener los desahucios, o participación real de la ciudadanía en los procesos de decisión "con la realización de consultas populares.
Las caceroladas en la ciudad se hacen cada noche. Últimamente se han esparcido por barrios de Cerdanyola
Arcadi Oliveres
"Vengo a Cerdanyola a explicar porque estoy indignado", decía el economista Arcadi Oliveres para abrir su charla, seguida por un muy numeroso público asistente a su conferencia en la plaza del Abad Oliba. Eran las 11 de la noche del pasado viernes dia 3 y la acampada ofrecía su imagen más participada después de haber hecho una cacerolada en manifestación improvisada por las calles más céntricas de la ciudad con más de 80 personas. La charla tuvo una numerosa asistencia. La acampada continúa en la plaza del Abad Oliba. Y el indignado Arcadi gritaba contra una crisis basada en la especulación inmobiliaria, cuando en Barcelona hay 100 veces más pisos vacíos que vagabundos sin techo, en la especulación financiera, en un momento de globalización que permite mover el dinero de inmediato sin trasladarlo, y falta de ninguna autoridad que impida esta especulación aunque estaban sobre aviso de los riesgos desde los años 90.